Llegar al ahora a través del cuerpo
Conclusiones después de leer el libro de E. Tolle “El poder del ahora”.
La pregunta clave es, ¿puedes seguir viviendo contigo? Según el escritor E. Toll tenemos un “contigo” que la mayor parte del tiempo está hablando y actuando por ti. Ese contigo es tu mente. La cual intenta que estés ocupado constantemente en pensar y no te permite el silencio y conectar con tu ser y vivir el ahora, el presente. Todo lo observas y procesas desde tu mente, luego puede ser que tu vida sea una ficción de tu mente.
El objetivo que tenemos que tener es acallar la mente y no identificarte con ella. La forma que él lo plantea es primero observar que dice y como lo dice. Dejarla hablarla.
Y plantea que una formar de acallarla es sentir el cuerpo, haciéndote estar en el momento presente a través de sentir tu cuerpo. Entonces creas momento “no mente” que hace aprender a tu mente a estar en silencio. Así eleva la frecuencia vibratoria del campo energético que da vida al cuerpo físico.
Debes plantearte poner el foco en el momento presente. Durante el tiempo que trabajar la corporalidad conectar de forma directa con el momento presente ya que estas constantemente en las sensaciones que tienes en el cuerpo, luego creas una brecha de tiempo en el pesar y solo estar en el presente.
Tu mente es una herramienta que está a tu servicio, la utilizas para resolver `problemas y luego deberías poder dejar de pensar. Para E. Toll la mente en adicción la denomina ego y c va a hacer que estés entre el pasado y el futuro.
La emoción surge en el punto donde se encuentran mente y cuerpo. , es el reflejo de la mente en el cuerpo. Ante un pensamiento hostil creara un acumulación de energía corporal a la que llamamos enfado y el cuerpo se prepara para luchar ante ese ataque y se contrae, este aspecto físico de la emoción se le denominamos miedo. Investigaciones pusieron de manifiesto que las emociones fuertes producen cambios en la bioquímica del cuerpo.
Si quieres conocer tu mente el cuerpo siempre te dará un reflejo fiel. Observa tus emociones o más bien siente tu cuerpo, ante un conflicto donde tu mente dice si y tu cuerpo dice no, quien miente es tu mente, pero recuerda que es la reacción ante un estado mental.
Recuerda que tu pensamiento está en tu cabeza, y la emoción tiene un fuerte componente físico. Al realizar esta observación, poco a poco te vas alejando de tu pensamiento, dejas de ser un poco tu mente, ya que eres el observador de la situación.
ADQUIERE EL HABITO Adquiere el hábito de preguntarte ¿Qué esta pasado dentro de mí en este momento? Solo observa, no analices. Siente la energía que está provocando este momento.
Al ser un hábito pasa al inconsciente y empiezas a separarte de tu mente. Eres más sincero contigo. Ante una emoción pregúntate si quieres sentir eso.
Si sientes dolor, E. Toll, lo que proponer es que te des cuenta que es algo mental generado por una creencia suele ser miedo creado por la sensación de abandono o de falta de plenitud, se puede resumir en dolor…la mente no puede encontrar la solución ya que es parte de ella.
CUANDO SE PARA LA MENTE Ante una emoción positiva es el resultado de silencio mental: ante un amanecer bellísimo, esfuerzo físico externo o un peligro extremo, se produce un silencio mental, la mente te habla. Se produce una brecha de silencio y este es el objetivo ya que sino no podrás sentir amor, paz y alegría.
Al realizar la sesiones de Corporalidad, paras la mete, haces brechas de silencio mental, ya que llegas toda tu atención a lo que pasa en tu cuerpo cuando realizas los diferentes movimientos que se te plantea.